Con la norma, el mismo comandante de la Policía Nacional podría ser investigado, ya que su eventual sumario no recaería en un personal inferior de la Policía, que generalmente queda en la nada. Para ello, los tribunales de Justicia Policial estarán conformados en dos salas compuestas por cinco miembros cada una, de la siguiente procedencia: Dos oficiales de la Policía Nacional designados por el comandante, dos funcionarios del Ministerio del Interior con formación jurídica y un miembro de la Judicatura designado por el Poder Judicial.
El Tribunal estará presidido por el personal de la Policía Nacional de mayor rango. Los miembros de la Policía Nacional designados como miembros del Tribunal no podrán ser de inferior rango al oficial de mayor grado encausado en el proceso.
