El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, participó ayer de la revisión del horno pirolítico de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), junto con el titular de esta cartera, Arnaldo Giuzzio, y el médico forense Pablo Lemir.
En conversación con radio ABC Cardinal 730 AM, Giuzzio indicó que la revisión se dio para constatar si el horno se podría utilizar en el marco de la pandemia del coronavirus.
“Habitualmente es utilizado para la incineración de drogas incautadas, pero se constató que el horno pirolítico de la Senad está en condiciones para incinerar cuerpos en caso de necesidad”, manifestó Giuzzio al programa Noticias y Más.
Giuzzio dijo que se necesitarán algunas modificaciones, pero que el horno cuenta con la capacidad para ser utilizado y que ahora ya está habilitado para la incineración de residuos quirúrgicos y patológicos.
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“Si el nivel de inconsciencia sigue, ese va a ser el final de muchos. Esperemos que no se tenga que utilizar”, agregó el ministro.
Cinco o seis cuerpos por día
Giuzzio manifestó que el de la Senad es el único horno pirolítico público que cuenta con la capacidad para ser utilizado para la cremación de cuerpos. “Después tengo entendido que hay solo uno o dos privados”, manifestó.
El titular de la Senad refirió que si bien se espera no llegar a esa situación, el equipo cuenta con capacidad limitada de cremar cinco a seis cuerpos por día y que en caso de que las cenizas vayan a ser entregadas a los familiares, la capacidad se reduce solo a tres por día.
“Algunos de los presentes hasta sugirieron que se entreguen plantitas como un simbolismo”, agregó.
El ministro reconoció que el análisis es crudo, pero que se basan en experiencias vistas en otros países en los que el Estado se vio sobrepasado en su capacidad de disponer de los cuerpos de las víctimas del coronavirus.
“Si la gente no entiende, el nivel de mortandad puede llegar al punto de que el horno no dé abasto y que se tenga que prever incluso la utilización de camiones frigoríficos”, acotó y recordó casos de países como Ecuador en los que los cuerpos quedaron tirados.
“La instrucción del Presidente es que la situación no nos puede tomar a contravía y que prevamos cualquier escenario posible con base en la experiencia de otros países”, acotó.
“Estamos preparados para lo peor, pero esperando siempre lo mejor”, indicó
Evitar lo de Ecuador
Pablo Lemir, director del laboratorio forense del Ministerio Público, señaló a ABC Cardinal que la previsión del horno pirolítico de Senad y la compra de bolsas mortuorias busca evitar que se llegue a situaciones como la que se dieron en Ecuador, donde los cuerpos fueron abandonados en las calles. “Las bolsas mortuorias hoy son más fáciles de conseguir que los tapabocas”, manifestó.