Los chefs del hotel se encargaron del menú, así como del postre y la torta.
El DJ del Excelsior puso buena música para que los chicos puedan bailar con sus amigos y familiares.
Los graduados harán su viaje de despedida a las playas del balneario Camboriú, para gozar y disfrutar de unos días espléndidos, recordando toda una vida de experiencia en la institución.
