La ambientación fue de estilo clásico, en la que abundaron las flores naturales, los telares en rosa y blanco, además de mobiliario vintage, espejos imperiales, macetas, faroles y velas. Hubo espacios diferenciados de adultos y jóvenes, además de un colorido espacio para bailar. Fue preparada especialmente por Mirian Doldán.

Los invitados disfrutaron de una deliciosa cena elaborada por el servicio gastronómico de Egasa. Consistió en un sabroso bufé de pastas para los adultos, mientas que los jóvenes degustaron papas fritas, hamburguesas y otras deliciosas minutas. También hubo una barra de tragos hechos por los profesionales de Moz. De postre, hubo torta y helados. La musicalización fue de Christian Lozano, mientras que la coordinación estuvo a cargo de Sara Valleau, del staff de la casa de fiestas.