Deflación y baja de precios

Este artículo tiene 5 años de antigüedad

La deflación es la situación opuesta a la inflación, en la que aumenta el valor de unidad monetaria como resultante de la baja de precios. Se produce deflación cuando la masa monetaria crece a un ritmo menor que la oferta total de bienes y servicios.

En la práctica esto casi nunca sucede, pues los gobiernos aumentan la oferta monetaria a un ritmo suficiente como para compensar ese crecimiento: de no hacerlo, podrían darse bajas en los salarios nominales, con el consiguiente malestar social que esto produciría. Las situaciones de deflación, por lo tanto, ocurren solo cuando se produce una recesión intensa: en este caso es la demanda global la que disminuye y no la oferta física la que crece; ante esta baja de la demanda la cantidad de dinero existente resulta insuficiente en proporción a la oferta que ya está en el mercado, por lo que los precios tienden a bajar.

De acuerdo con el reciente informe del Banco Central del Paraguay (BCP) sobre el Índice de Precios al Consumidor (IPC), en el mes de junio se registró el tercer mes deflacionario del año. La entidad monetaria encontró una variación del -0,4% en junio, en mayo -0,6% y abril -0,2%, acumulando en el primer semestre del año una variación del -0,6%. La caída de los ingresos de los ciudadanos impactados por la cuarentena sanitaria derivó consecuentemente en una baja del consumo, y la demanda de bienes y servicios.