La corbata complementa la camisa y el traje masculinos, pero, además, desempeña otros roles en términos de presencia. Esta prenda puede revelar mucho más de lo que imaginaríamos. Por ejemplo, es capaz de expresar con elevada precisión la personalidad de un hombre o su estado de ánimo.
Normas básicas del buen uso:
Los nudos deben ajustarse al cuello de forma que el botón superior de la camisa –que irá siempre abrochado– no se visualice.
La parte más estrecha nunca será vista por detrás de la ancha.
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No sobrepasará el cinturón en ningún caso.
Con camisas estampadas se usan corbatas lisas y viceversa.
Se recomienda elegir primero la camisa, cuyos tonos dominantes sean acentuados por una corbata, sin que el diseño de ambas coincidan. Es de rigor asegurarse que estas piezas pertenezcan a una misma paleta de colores.
Las corbatas no están ajenas a las nuevas tendencias y van cambiando, aunque más lentamente. Por eso, conviene adquirir alguna de vez en cuando para no quedar "pasado" de moda.
Tipos de nudos:
Simple: el gran clásico, y más utilizado por su simplicidad y fácil combinación con la mayoría de los cuellos. Ideal para los hombres de talla mediana, presenta forma cónica y alargada, además de que resulta estrecho con corbatas finas y más ancho con las gruesas.
Doble: muy parecido al anterior, pero más grueso por su segundo enrolle. Va con casi todas las camisas y corbatas, salvo las gruesas.
Windsor: llamado así en honor a quien lo popularizara, el duque de Windsor, es para las grandes ocasiones. De compleja hechura, se corresponde preferentemente con cuellos amplios, como el italiano o el Windsor.
Medio Windsor: similar al Windsor, pero más delgado y simple, luce con corbatas finas. Elegante y triangular, calza regiamente con cuellos clásicos o abiertos.
Mariposa o moño: pese a sus múltiples variaciones cromáticas y de diseño, suele ser negro, y destaca con un esmoquin del mismo color y camisa blanca con cuello para moño. También se usa con traje y camisa de cuello amplio.
Recuerda: La corbata realza el torso y la camisa, añadiendo estilo, elegancia y textura.
Hasta la próxima entrega…
