"Hay que cuidar mucho este festival porque la calidad y la amabilidad que hay en este lugar es muy emocionante", dijo la directora tras recibir el galardón.
La cinta, en blanco y negro , narra la vida de cuatro personajes en una ciudad con una lluvia persistente: un cocinero, un técnico desempleado, una enfermera en un hospital público y una empleada en una librería.
Por su parte, el debut en la dirección de la actriz chilena Manuela Martelli, "1976", se alzó con el premio al Mejor Largometraje Chileno.
Aclamada por la crítica en las pasadas ediciones de Cannes (Francia) y San Sebastián (España), "1976" es también la carta para representar a Chile en la carrera para la nominación de los Goya.
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La cinta sigue a una mujer de la alta burguesía santiaguina que emprende un camino de autoliberación cuando recibe el encargo de un cura amigo para auxiliar en la clandestinidad a un opositor a la dictadura de Augusto Pinochet y decide ocultárselo a su familia afín al régimen.
En una entrevista con EFE esta semana, Martelli dijo que su objetivo era "homenajear a las mujeres que por tanto tiempo fueron sujetos anónimos, que pasaban desapercibidas en los libros, en una historia escrita por hombres y donde ellos eran protagonistas".
"Lo que me interesaba contar es la historia desde el espacio cotidiano porque lo que parece más banal del día a día es lo que finalmente hace historia", agregó.
Tanto el Premio del Público como el Premio Especial del Jurado recayó en "Tan inmunda y tan feliz", del chileno Wincy Oyarce, en la que recupera la figura de Hija de Perra, una artista travesti que se convirtió en ícono de la disidencia y referente del "under" latinoamericano tras su muerte en 2014.