Según la investigación del fiscal Orlando Quintana, el pastor evangélico habría abusado al menos de diez niñas en una comunidad indígena localizada al sur de Alto Paraná. Denis Torres frecuentaba la comunidad desde hacía 40 años para trabajos pastorales.
Las víctimas relataron su dramática experiencia en la cámara Gesell, bajo las reglas del anticipo jurisdiccional de prueba.
El fiscal Quintana y los abogados querellantes Noelia Núñez Martínez y Andrés Soto Sánchez solicitaron la elevación de la causa a juicio oral y público, al considerar que existen pruebas que incriminan al acusado.
El caso salió a luz pública a raíz de la denuncia presentada por una docente. La denunciante dijo a la Policía que encontró al pastor evangélico en flagrancia cuando manoseaba a una niña en sus partes íntimas durante la celebración de una festividad en la comunidad indígena.
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Tras la primera denuncia, aparecieron otras víctimas, algunas incluso ya mayores, a contar también su testimonio.
Acorde al relato de las víctimas, el acusado ofrecía golosinas a las niñas a cambio del manoseo.