"Hay que señalar con tristeza que la mayoría de los fallecidos tenían entre 25 y 44 años", lamentó Chikunga en la presentación de las estadísticas de tráfico en Johannesburgo, en declaraciones recogidas por medios locales.
A pesar de que supone una cifra alta, la ministra afirmó que se había reducido la tasa mortal en comparación con las 1.560 víctimas mortales que se registraron el año pasado durante el mismo periodo.
La mayoría de accidentes se registraron durante la primera, tercera y cuarta semana de diciembre.
"La primera semana incorporaba el fin de semana del día de pago (de sueldos), cuando la gente había recibido primas y celebraba fiestas de fin de año", declaró la ministra.
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La tercera semana estuvo marcada por el 16 de diciembre, día festivo nacional, mientras que la cuarta coincidió con las vacaciones de Navidad.
"La mayoría de los accidentes mortales se registraron los domingos, lo que constituye una nueva tendencia", afirmó, al añadir que la mayoría de accidentes se produjeron entre las 19:00 hora local (17:00 GMT) y las 22:00 hora local (20:00 GMT).
La velocidad más alta registrada fue de 225 kilómetros por hora y la tasa de alcohol más elevada de 2,48 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, siendo el límite legal de 0,24 miligramos.
Chikunga añadió que el 40,9 % de los fallecidos eran peatones, el 33,6 % pasajeros, el 24,6 % conductores y el 0,8 % ciclistas.
Según el informe publicado a finales de mayo de 2023 por la Asociación de Automóviles (AA) sudafricana sobre el estado de la seguridad vial en Sudáfrica, 12.436 personas murieron en 2022, casi la mitad de ellos -43 %- peatones.
La causa muchas veces reside en la "cultura de conducción impune en la que los conductores se saltan la ley con regularidad por falta de consecuencias", como afirmó la AA, que calificó el problema como una "crisis nacional".