Jatahy acaba de estrenar en España "Depois do silencio (Después del silencio)", un repaso a la historia de la esclavitud en su tierra con unas raíces que se extienden hasta nuestros días.
El festival Temporada Alta de Girona y Salt (nordeste) ha acogido la llegada a España de esta tercera pata de la "Trilogía del horror", en la que indígenas y afrodescendientes son esta vez los protagonistas de la historia.
Una pantalla que ejerce de segundo escenario por su posición pero casi de primero por su peso relata en forma de vídeo la situación de esclavitud que se vive en Chapada Diamantina, territorio del Estado de Bahía.
Los principales personajes de ese audiovisual cobran vida en carne y hueso ante los ojos del espectador para dar fe de toda esa denuncia con ayuda de sus palabras, pero también de la música y de rituales que incluyen la posesión.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Esta producción de Vertice-Arxis, el Temporada Alta y otros festivales y equipamientos europeos, habla de esclavitud, pero también de conceptos reivindicativos como el del papel de la mujer en la búsqueda de la justicia social.
Las protagonistas femeninas de "Depois do silencio" están comprometidas en toda esa lucha contra un racismo y supremacía que se ha perpetuado hasta nuestros días.
La "Trilogía del horror" se construye sobre el ejercicio de la violencia que, en esta tercera creación, se convierte casi en personaje con entidad propia sin renunciar a otros conceptos positivos como el amor tal y como reivindican los actores de carne y hueso.
Y todo ello concebido por Christiane Jatahy, ganadora este verano del León de Oro de la Bienal de Teatro de Venecia, como una fórmula para alertar del peligro que supone la irrupción del fascismo en las estructuras de poder, no sólo de Brasil, aunque estos días la mirada esté allí.
La pieza, basada en "Tortuoso arado", la novela de Itamar Vieira Junior, es eje de "Depois do Silencio" junto al documental "El hombre marcado por la muerte", de Eduardo Coutinho, que profundiza en la historia de Joao Pedro Teixeira, mártir de las luchas por el derecho a la propiedad de la tierra.
Una de las claves de la magia de esta obra es la incorporación de recursos audiovisuales al teatro en una proporción de igual a igual que hace que los protagonistas del vídeo salgan de la pantalla sólo para ganar cercanía.
Otra es que los actores, Gal Pereira, Juliana França, Lian Gaia y Aduni Guedes, son todos de origen afrobrasileño y encarnan una vuelta de Christiane Jatahy al teatro de su país.
El resultado es sobrecogedor y plantea preguntas sobre cómo han llegado al siglo XXI situaciones de este tipo y sobre la responsabilidad de quienes gobiernan este mundo hasta el punto de que Jatahy puso en duda en la semana de este estreno en España si podría regresar a Brasil en caso de victoria de electoral de Bolsonaro.
Todavía faltan dos días para que los brasileños acudan a las urnas, pero la dramaturga y directora, cuyos personajes califican la obra como una "venganza", ya ha dejado clara su visión sobre lo que puede suceder.
