Esta decisión que entró en vigor desde el martes 3 de enero se extiende a toda la región de Niamey por una duración de 21 días, según recoge una decisión del gobernador.
La alerta sobre la detección de dos focos de gripe aviar en el país la dio ayer jueves a través de los medios del país el director general de los servicios veterinarios del Ministerio de Cría, Abdou Issiako.
Según Issiako, los primeros contagios se detectaron el pasado 14 de diciembre en la localidad de Bouza, región de Tahoua (centro del país) tras una inspección rutinaria de los servicios veterinarios cerca de la localidad, concretamente en el pueblo de Alloumoudou donde se observó la muerte de muchos aves de corral que fueron comprados por una ONG internacional para apoyar a las familias vulnerables en esta zona.
"Se han diagnosticado 4.920 aves de un total de 11.000 y todas fueron infectads. Se han efectuado análisis que se mandaron al Laboratorio Central de Cría de Niamey (LABOCEL) que confirmó el pasado 19 de diciembre la presencia del virus H5N1 altamente patógena", alertó Issiako.
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Al día siguiente, una misión de la Dirección Regional del Ministerio de Cría de Tahoua se desplazó al lugar para llevar a cabo una investigación sobre lo sucedido. Responsables de la ONG -donde se descubrieron las aves infectadas- explicaron que "la compra de aves debería realizarse a nivel local para apoyar a cinco aldeas del municipio de Karofane, pero el vendedor trajo los ave de otra aldea en Zinder en el sureste del país".
En cuanto a los focos de Niamey, el primero fue detectado y confirmado el 19 de diciembre en una finca avícola en Goudel, un pueblo periférico de la capital, y el segundo el 25 de diciembre en Basora, donde se detectaron respectivamente 1.000 y 1.400 aves totalmente contagiadas.
Issiako lamentó que la propagación del virus obligó a sacrificar un total de 7.320 aves en los sitios contaminados, al tiempo que añadió que se dieron instrucciones para tomar medidas drásticas en las zonas afectadas par frenar la propagación del virus como impedir la salida y entrada de aves en las localidades donde se detectaron los contagios y desinfectar el material usado en las explotaciones de aves de granja, entre otros.
El gobierno implementó también otras medidas como la creación de un comité encargado del censo de las familias afectadas en los cinco pueblos de Korafan para indemnizarles, al tiempo que pidió a la ONG suspender inmediatamente la compra de aves e introducirlas en Bouza.