Le Monde, que cita a una persona próxima al jefe del Estado depuesto cubierta por el anonimato, explica este sábado detalles sobre esa iniciativa que vienen a confirmar en buena medida las revelaciones de los mismos golpistas, que habían denunciado una maniobra para una posible intervención de Francia.
Esa fuente citada por el periódico francés indica que cuando al cabo de unas horas el 26 de julio entendieron que se estaba desarrollando un golpe de Estado contra Bazoum, su ministro de Exteriores, Hassoumi Massaoudou, que ejercía de primer ministro, fue el que hizo la solicitud.
"Francia -añade- pidió que hubiera una autorización escrita" ante una demanda lanzada por fuerzas leales al presidente, que preparaban una acción para liberarlo porque todavía la consideraban posible.
De acuerdo con esa versión, militares franceses de los que están estacionados en Níger (hay 1.500, esencialmente en una base en la capital, Niamey, en virtud de un acuerdo con las autoridades ahora depuestas) llegaron al cuartel general de la Guardia Nacional en la madrugada del 27 de julio.
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Tenían una docena de vehículos y helicópteros listos para actuar, siempre según la misma fuente, que afirma que los militares franceses les dijeron que estaban en capacidad de llevar a cabo la operación para liberar a Bazoum.
Sin embargo, el presidente nigerino se opuso y llamó directamente al jefe de las operaciones francesas en Níger para decírselo, porque tenía todavía esperanzas en superar la crisis abierta mediante el diálogo.
Por la parte francesa también había reticencias porque veían que una parte de las fuerzas leales a Bazoum se estaban decantando por los golpistas y la condición imprescindible que habían fijado era que su eventual intervención no se hiciera en solitario, sino en apoyo de elementos nigerinos.
La junta golpista autodenominada Consejo Nacional de Salvaguardia de la Patria (CNSP) reclama desde hace semanas la salida de todos los militares franceses de Níger y ha denunciado los acuerdos en los que se asienta su presencia.
Pero París se niega con el argumento de que no reconoce a esa junta y de que la única autoridad legítima es la del presidente Bazoum, que está detenido por los golpistas desde el 26 de julio.