La Plaza Mayor de la localidad volvió a ser el escenario de una megatapa de 5,37 metros de diámetro.
Los expertos pulpeiros, situados en el perímetro, fueron cubriendo a gran velocidad el típico plato de madera en el que se sirve el pulpo en el norte de España gracias a un extraordinario manejo de las tijeras, con los termómetros a casi 30 grados.
Una vez presentado, los 590 kilos de pulpo, 10 más que en la anterior edición, fueron aliñados con sal (7 kilos), pimentón (3 kilos) y aceite de oliva (50 litros).
Después, se distribuyeron en raciones en los habituales platos de madera del 'pulpo á feira' y fueron degustados por los vecinos y turistas.
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El pueblo ostenta el récord Guinness y se quedó sin rival desde que logró arrebatárselo a la ciudad de Bilbao (norte) en 2016.
O Carballiño lleva desde el lunes celebrando la 'Festa do Pulpo', un evento que se remonta al año 1964, cuando un grupo de amigos decidió llevar los cefalópodos a unas improvisadas mesas en el Parque Municipal.
La fiesta fue declarada de Interés Turístico Nacional en el año 1972.
Esta sexagésima segunda edición se dedica a la Denominación de Origen del vino Ribeiro y el programa festivo continúa hasta el domingo, día en que está prevista la gran romería.