Jaibi participó en la conferencia 'La cooperación euromediterránea en materia de migración: el caso de Túnez', que tuvo lugar en la Casa Árabe de Madrid este miércoles, donde analizó la cooperación entre la UE y los países del sur del Mediterráneo en materia de migración atendiendo al caso tunecino.
La profesora de Derecho Europeo y Derecho de Migración en la Universidad de Túnez planteó si la promoción de los derechos humanos a nivel interno de la Unión Europea ha ido acompañada, a nivel externo, de la protección de los derechos de los migrantes.
En este sentido, señaló que, mientras que la UE considera a Túnez un "país tercero seguro" en materia de migración, lo que permite denegar solicitudes de asilo de ciudadanos procedentes de países con esta calificación, tiene "resoluciones criticando la situación de los derechos humanos en el país".
Por ello, Jaibi cree que la UE debe replantear sus mecanismos de cooperación en migración actuales, porque "no está compartiendo responsabilidades con otros países, sino que las está transfiriendo".
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"Hay que ir mas allá de la lógica imperante de donante y beneficiario, no vamos a resolver la cuestión migratoria sólo con apoyo económico al país tercero", aseguró, añadiendo que "no hay una asociación entre iguales, no tenemos las mismas prerrogativas ni los mismos medios".
Así, considera que Túnez no está preparado para pasar de ser "un país de emigrantes" a uno de tránsito o destino y explicó que esto provoca una falta de aceptación de la diversidad, "sobre todo de la que llega del sur del continente".
La experta detalló que, aunque el memorando de entendimiento entre la UE y el país norafricano firmado en 2023 recoge un control de los flujos migratorios basado en el respeto a los derechos humanos, esto no asegura que se produzca.
Aun así, subrayó que en los últimos años se han aprobado leyes progresistas sobre protección de derechos humanos que amparan a las personas inmigrantes.
En relación con la democratización de la sociedad tunecina, señaló la política europea de vecindad aunque recordó que "no se hace con una varita mágica, es una cuestión de tiempo".