En un mensaje implícito a Estados Unidos de cara a la cumbre de la OTAN de la próxima semana en La Haya, fuentes del Elíseo consideraron hoy que aumentar el gasto en defensa y seguridad al 5 % del PIB (un 3,5 % para defensa y el resto para seguridad en general) supone "un esfuerzo enorme para todos".
"Es difícil hacerlo al mismo tiempo que (se libra) una guerra comercial", insistieron las fuentes, que insistieron en que lo importante, más allá de una cifra, "es que Europa sea capaz de hacer lo que necesita para defender el continente".
La propuesta inicial del secretario general de la OTAN, el neerlandés Mark Rutte, es alcanzar ya en 2032 la cifra pedida, pero las fuentes francesas recalcaron que "varios países" han señalado que esa fecha "no es factible", por lo que "la última propuesta" apunta a 2035 con una cláusula de revisión en 2029.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, comunicó hoy a Rutte el rechazo de España a comprometerse a un nuevo aumento de gasto en defensa, y considera que, para el país, llegar al 5 % que ha planteado a los aliados "no es razonable" y podría ser contraproducente.
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Las fuentes del Elíseo reconocieron la "preocupación" que genera la cifra en España, y recordaron que alcanzar el actual objetivo del 2 % del PIB, ha necesitado diez años.
Sin embargo, insistieron en que los europeos deben aumentar los gastos de defensa "no porque alguien nos lo pida, sino porque nos lo debemos a nosotros mismos". Eso se debe a que los europeos han dependido de otros para su seguridad "durante mucho tiempo", añadieron.
Francia, que siempre ha sido el país europeo de la OTAN que más ha defendido la autonomía estratégica respecto a EE.UU., mantiene también que ese esfuerzo presupuestario en defensa, que califica de "enorme", debe verse reflejado "en nuestros territorios y poblaciones", en una alusión a que deben comprarse equipos y tecnologías europeos.