Pero aquí en Paraguay los consejeros económicos del Presupuesto General de la Nación tales como son los ex ministros de Hacienda, ex presidentes del Banco Central, conocidos economistas y los dirigentes de la CAP, UIP, etc, cada año y desde hace varias décadas hacen exactamente las mismas peticiones y recomendaciones a los gobernantes del Poder Ejecutivo y del Legislativo, sin resultado.
Los consejeros económicos y en especial los gobernantes se olvidan de que se deben anular por completo las CAUSAS que impiden que en el Paraguay se tenga un P.G.N equilibrado. Y una de esas causas es la colosal corrupción pública, la cual tiene diversas modalidades, siendo la peor de todas ellas el sistema prebendario clientelista, al cual se lo puede considerar criminal porque consiste en la repartija de los bienes del Estado entre los principales dirigentes políticos del Gobierno de turno y sus sostenedores.
Y dicha repartija que comienza durante la elaboración del presupuesto, con la concesión de salarios, bonificaciones, etc a operadores políticos, planilleros, parientes, empleados particulares y otros, NO termina allí como muchos creen, sino que luego tanto en la capital del país y especialmente en las ciudades del interior, los clanes familiares o las roscas de amigos politiqueros, SE ADUEÑAN de las diferentes instituciones públicas.
Por ejemplo, en una ciudad del interior del país, si un senador o diputado o presidente de seccional o gobernador o intendente o antiguo caudillo local del partido gobernante del país, quiere adueñarse del IPS de esa ciudad, lo hace y se convierte en el exclusivo propietario de dicha institución con derecho a utilizar todo lo que se le antoje como si fuera de su propiedad, nombrando como director o jefe o administrador a sus propios parientes o a sus operadores políticos, con lo cual se aseguran de tener la máxima lealtad a la hora de manipularles para obtener todos los beneficios que necesita para mantener satisfecha a su clientela política.
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Y debido a ello muchos asegurados del IPS que van a consultar en Hospitales manejados por directivos que son digitados por los politiqueros de turno, se encuentran con que en vez de ser dicha institución un adecuado centro de atención a los pacientes es, por el contrario, un antro de corrupción, ya que en más del 90% de los casos dichos directivos carecen de idoneidad profesional y moral, con lo cual se tiene una institución que aunque esté bien equipada NO sirve a la ciudadanía porque desde la cabeza directiva se derrama en cascada la corrupción hacia la mayoría de los funcionarios de la institución.
Por todo ello puede decirse que mientras no se desmantele el sistema prebendario clientelista seguiremos teniendo como resultado un presupuesto general para criminales y NO un presupuesto general para la Nación paraguaya.
Y para erradicar el sistema prebendario clientelista y su “elemento estrella” los “cargos de confianza”, lo que urge hacer es modificar ya en este año 2019 la Ley de la Función Pública de tal manera a que dichos cargos sean ocupados por personas con capacidad profesional y moral a través de concursos de oposición.
Por todo lo dicho, sería conveniente que para mejorar el país, los consejeros económicos miren no solo el bosque sino cada uno de los árboles, y para ello, deberían exigir que por ejemplo los senadores, diputados y otras altas autoridades den respuestas exactas sobre llamativas contrataciones y nombramientos de parientes, en distintos cargos públicos.
Elena T. Torres Báez