El riesgo consiste en que las aves, al mordisquear los juguetes, traguen fibras que junto a saliva y restos de comida pueden formar una bola en el buche, un cuerpo extraño que habría que extraer mediante cirugía. De lo contrario, las bacterias se multiplicarían rápidamente en el interior y exterior de la bola y podrían producir una infección en el buche.
¿Cuál es la alternativa? La publicación aconseja utilizar materiales como ramitas, corcho o acero inoxidable y recomienda especial precaución con las cadenas galvanizadas, ya que existe riesgo de envenenamiento por zinc.
Los expertos señalan que, aunque el material sea el adecuado, los amantes de los pájaros no deben decorar jaulas y pajareros en exceso, ya que la abundancia de juguetes no debe ser a expensas de la libertad de movimiento.
