La celebración religiosa estuvo a cargo del obispo de las diócesis de Misiones y Ñeembucú, monseñor Pedro Collar Noguera, que durante su homilía destacó que cada fiesta patronal es un encuentro con Dios, “quien es amor”.
“También ayuda a renovar la fe y el compromiso con Cristo, que camina y nos acompaña en nuestra vida”, añadió monseñor Noguera. Al término de la misa, se realizó procesión con la imagen de San Francisco Solano por las principales calles del distrito.
A raíz de las lluvias que afectan al departamento de Misiones, las diferentes actividades previstas para la festividad quedaron suspendidas.
