La mayoría de los comerciantes cuentan con una gran cantidad de peces para vender y solo les queda poco más de una semana para agotar sus existencias.
El 4 de noviembre arranca la veda o prohibición de pescar, pero los vendedores tienen una semana de gracia para comercializar sus peces.
“No sé por qué la veda nos tiene que afectar a los vendedores, porque nosotros no recibimos subsidio y tenemos los gastos de alquiler que tenemos que pagar durante esta prohibición, creo que la veda debe ser solo para los pescadores”, dijo el vendedor Roberto Jara.
Jara opinó que lo que se debe controlar es la pesca para a la reproducción de los peces, pero que no tiene sentido prohibir la venta de los animales ya pescados.
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Consideró que la ley obliga a los trabajadores a delinquir, porque se vende pescado en forma clandestina.
“Se debe coordinar mejor y elaborar las leyes sin lesionar a nadie, porque esta ley perjudica a los vendedores y nos obligan a vender en forma clandestina, porque qué vamos hacer con los pescados que no sobran, no se puede congelar 40 días”, dijo Jara.
El comerciante instó a las autoridades a controlar que se cumpla la veda pesquera y que sean honestos a la hora del control, asegurando que muchos aceptan coimas para permitir la pesca en el río.
Jara cuenta con más de 2.000 kilos de pescado y aseguró que no podrá vender todo en una semana.
Igualmente, el vendedor José Marecos afirmó que una semana es poco tiempo para vender todo el stock. El mismo cuenta actualmente con más de 400 kilos de pescado.