De acuerdo con el informe emitido desde la comisaría 17ª Central, asentada en el barrio San Isidro de Lambaré, la fiscala Teresita Torres acudió a esa dependencia para pedir acompañamiento de policías para efectuar un allanamiento.
Así, a las 7:00 de ayer la fiscala y policías del área de investigación del departamento Central y de las comisarías 4ª y 17ª, dieron cumplimiento a la orden de allanamiento firmada por la jueza Penal de Garantías Isabel Bracho. En la casa fue detenido a Cristian De Los Santos Méndez Ramírez, por una causa de robo agravado.
Sin embargo, De Los Santos ya contaba con orden de captura pendiente por violencia familiar, causa que está en la unidad penal N° 2 de Capiatá, a cargo de la fiscala Carolina Martínez.
Del poder del hombre fue incautado un teléfono celular. De su domicilio fue llevado hasta la sede del Ministerio Público para que preste su declaración indagatoria correspondiente al proceso.
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Miembro de peligrosa banda
Según los antecedentes, el ahora detenido Cristian Méndez formaba parte de una de las dos gavillas que en el año 2010 se dedicaban a perpetrar asaltos contra ciudadanos extranjeros que habitaban las distintas localidades del departamento de Cordillera.
El grupo delictivo que integraba estaba encabezado por Julián Villar, hermano del conocido José “Coco” Villar, abatido en el Chaco. También formaban parte de la banda Eliseo Da Silva Giménez y Derlis Espínola Moreno –quienes fueron asesinados en distintas circunstancias–, así como Juan Carlos Mendoza, Teresio Da Silva, Carlos Genaro Méndez y Roberto Pereira.
Homicidio
En la noche del 3 de marzo de 2010, la pandilla sorprendió a tiros al matrimonio conformado por Jacques Pierre Frederic Gerard Graulds (66) y Tholen Marcelle Roberte Henriette (78) (belgas), quienes cenaban en su domicilio. Tholen murió inmediatamente, Jacques se enfrentó a los maleantes y logró herir a dos de ellos antes de morir.
Fuga
Tras el asalto mortal, Méndez fue detenido. El 1 de agosto de 2018 fue trasladado de Tacumbú, donde cumplía su pena por homicidio, al Palacio de Justicia donde tenía audiencia con una psicóloga. El reo entró a una de las oficinas y los guardias quedaron afuera. Tras un largo tiempo el custodio revisó la pieza, pero Méndez ya no estaba. Nadie se percató de su huida.
