El fiscal la Unidad contra Delitos Económicos y Anticontrabando Eugenio Ocampos Rodríguez tuvo un exponencial crecimiento patrimonial, de acuerdo a lo que él mismo hizo constar en sus declaraciones juradas.
En diciembre de 2001, cuando ingresó al Ministerio Público, declaró un modesto pasar cuando presentó sus primeros documentos ante la Contraloría General de la República.
Ocampos no tenía inmueble alguno ni cuentas de ahorro. Sí declaró deudas que alcanzaban G. 1.000.000.
Su mayor activo era un automóvil Fiat tipo Uno Mille que él mismo valuó en G. 6. 000.000. Su patrimonio neto era de apenas G. 5.000.000.
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Su sueldo de la época era G. 2.050.000 y no declaró ingreso extra además de su sueldo de funcionario público.
Dos “viviendas” de casi 2.000 metros cuadrados
Ocampos no presentó declaración jurada alguna durante más de una década ante la Contraloría General de la República, a pesar de que debería haberlo hecho cada vez que fue ratificado como agente fiscal.
La última declaración jurada del agente fiscal que fue publicada por la Contraloría General data de 2015. Para ese entonces, Ocampos ya había conseguido un muy buen pasar.
Para ese año, el fiscal declaró primero un automóvil Mercedes Benz que luego cambió por una camioneta Hyundai Tucson.
De no poseer inmueble alguno, el fiscal Ocampos pasó a ser dueño de propiedades que juntas valían -según él mismo- G. 900 millones.
Una de las propiedades tenía una superficie total de 1.120 metros cuadrados y construcción de 400 metros cuadrados. Ubicada en Ypané, la tasó en G. 600 millones.
La otra propiedad tenía una superficie total de 525 metros cuadrados y construcción sobre 260 metros cuadrados. Ambos inmuebles los hizo figurar como “vivienda” y en diferentes zonas de Ypané.
Sus activos habían superado la barrera de los G. 1.000 millones y debido a sus deudas su patrimonio era de G. 934 millones. Tomando sus propias declaraciones, Ocampo experimentó un crecimiento patrimonial de 18.586%
Las negociaciones
Audios filtrados en 2017 revelaban que el entonces senador Óscar González Daher (ANR, cartista) y titular del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) acostumbraba “negociar” casos con el fiscal Eugenio Ocampos.
En una conversación entre el hoy acusado González Daher y el concejal de Mariano Roque Alonso Hérib Mármol (ANR), el primero se jactaba del tráfico de influencias que ejercía sobre fiscales en los casos judiciales de su interés. “Ya negocié con los fiscales Eugenio Ocampos y Takahashi”. “El martes lo voy a liberar a uno de los jueces, y a (Alexis) Takahashi el fiscal (de Villa Hayes) que controla la Rural”.