El pabellón tiene capacidad para diez pacientes en áreas diferenciadas y aisladas por mamparas, con oxígeno individual. Asimismo, cuenta con sanitarios sexados para médicos y enfermeras y otro para los pacientes, además de una zona de enfermería, con aire acondicionado central. Además, se han ejecutado trabajos como construcción de empedrado en el acceso, tinglado, escalera, muros de contención y otros.
El mobiliario y equipamiento corrieron por cuenta del Ministerio de Salud Pública, por lo que se tuvo un pequeño atraso en la habilitación del local, teniendo en cuenta que las obras de infraestructura ya estuvieron culminadas 30 días atrás.
Las obras fueron adjudicadas a la Sociedad Constructora Chaco, representada por el Ing. Manuel López Cano, aclarando que la contratación no pasó por un proceso en la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP), teniendo en cuenta que el Consejo local de Salud llamó a un concurso de ofertas, donde se presentaron cuatro firmas y fue adjudicado el que ofreció el menor precio, según manifestó el jefe comunal Manuel Gini (PLRA), presidente de dicho ente.
En ese sentido, la Municipalidad local transfirió al Consejo local de Salud G. 531 millones de recursos de royalties para la construcción, a raíz de la pandemia del COVID-19 y la necesidad de contar con un área para atender a los enfermos en la comunidad.
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