CIUDAD DEL ESTE (Tereza Fretes Alonso, de nuestra redacción regional). Representantes de diversas instituciones y de gremios de diversos sectores se reunieron ayer para evaluar la reapertura del puente de la Amistad. El tema principal es la seguridad, pero a pesar de las quejas y reclamos, los gremios de comerciantes y empresarios se mostraron muy optimistas para los últimos meses del año.
“Desde todo punto de vista vemos algo muy positivo, muy favorable. De no vender absolutamente nada durante siete meses, de lo que se venda en una semana ya es algo válido y bien visto. También nos mostró que hay muy buena perspectiva en el resto del año para prepararnos para la venida de más turistas. Todavía no tenemos las cifras sobre las ventas, pero mejoraron lo suficiente para dar tranquilidad a todos los que dependen del microcentro”, afirmó Linda Taigen, presidente del Consejo de Desarrollo de esta ciudad.
Sobre los efectos de la devaluación del real frente al dólar, aseguró que los brasileños aún ven muy competitivo al mercado local a pesar de la cotización de su moneda.
Precisamente, para seguir atrayendo clientes, para mediados de noviembre se prevé un “Black Friday modo covid”, para evitar aglomeraciones.
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Inseguridad
Por otra parte, la queja que persiste entre los participantes del encuentro es la falta de seguridad. Afirman que los “pirañitas”, como se denomina a los “guías” de compras, asedian en exceso a los pocos turistas que entran y que entre ellos se mimetizan asaltantes o estafadores de extranjeros.
Ever Olmedo, presidente de la Federación de Mototaxistas, dijo que están preocupados por la seguridad y la falta de acción de las autoridades, pues desde hace años hay quejas pero no pasan de las reuniones.
Por su parte, José Ayala Cambra, jefe de gabinete de la Gobernación del Alto Paraná, explicó que se tomarán tres acciones: la conformación de una comisión departamental de seguridad, buscar una reunión con el fiscal adjunto para dar seguimiento a los procesos penales y dar cumplimiento a una ordenanza municipal del año 2015 que prohíbe la presencia de “pirañitas”.