En las últimas 48 horas se registraron lluvias de diversa intensidad en el valle del Pilcomayo, luego de 12 meses sin precipitaciones.
Las lluvias trajeron alivio a los productores, pero aún son insuficientes para decir que terminó la prolongada sequía que enfrentan.
Tras un año sin agua, los campos de pastura se convirtieron en pajonal y no sirven como alimento para el ganado vacuno.
La prolongada sequía tuvo como resultado la mortandad de animales, por falta de alimento.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
A diferencia de años anteriores, la sequía no tuvo mayor impacto en la fauna silvestre. El canal paraguayo en el Pilcomayo está funcionando sin inconvenientes, lo que permite el ingreso de aguas en nuestro territorio.
El Ministerio de Obras Públicas y la Comisión Nacional del Pilcomayo tuvieron éxito en la limpieza del canal, lo que permite que en plena temporada de sequía se pueda contar con agua en la cañada La Madrid.
El Pilcomayo ingresa en un canal artificial que se conecta con La Madrid, cauce que permite su ingreso en el interior de nuestro Chaco.
El agua disponible se denomina caudal ecológico y sirve fundamentalmente para mantener con vida a la fauna silvestre.
Con respecto al agua disponible, desde Pozo Hondo el productor Alberto Jaime nos confirmó que el río tuvo un aumento de nivel, como resultado de lluvias registradas en la zona así como en el sector de Villamontes (Bolivia).
Se espera que entre martes y miércoles llegará este muy ligero repunte a la embocadura del canal paraguayo, para ingresar en nuestro territorio.
Registro de precipitaciones
Nirma Servín, productora afincada en la zona de Línea 32, departamento de Boquerón, nos facilitó algunos datos de las precipitaciones en la zona del Pilcomayo.
En los alrededores de la Picada 40 cayeron 100 milímetros mientras que en el sector de 10 Leguas se tuvieron 45 milímetros.
En la zona de Pratts Gill, 50 milímetros. En Campo Alegre, 100 milímetros; Campo Aceval, 70 milímetros.
En Cruce Douglas también se tuvo un registro de 100 milímetros, mientras que en la estancia La Huerta, localizada en la zona de Lolita, superó los 100 milímetros; en las afueras de Pozo Hondo, 100 milímetros. En el poblado, nada.
Puede notarse que el promedio de precipitación es generalizado e importante para cargar los tajamares, pero aún insuficiente para recuperar los campos de pastura.
