El Senado primero sancionó el proyecto que otorga US$ 17 millones a las gobernaciones departamentales (US$ 1 millón por departamento), para asistir a la población más vulnerable.
El proyecto establece que de estos fondos, los gobernadores podrán utilizar hasta el 20% para gastos corrientes, 60% para gastos de capital dando preferencia a la mano de obra y a las empresas que se encuentran en territorio departamental; y el 20% para obras en salud.
Esta parte del paquete ya tenía media sanción de la Cámara de Diputados y en la sesión de ayer del Senado, fue rápidamente sancionado, incluso se adelantó su tratamiento.
Senadores, además, dio media sanción y pasó a Diputados el proyecto que destina US$ 32 millones para inversión del Ministerio de Obras Públicas y comunicaciones (MOPC), US$ 24 millones para el Ministerio de Agricultura (MAG) para atender el acuerdo con los campesinos y US$ 1 millón para agua potable de localidades del departamento de Paraguarí.
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Lo previsto para agua potable fue incluido por el senador Juan Darío Monges (ANR-cartista), quien argumentó que el fin de semana pasado en diferentes localidades de su departamento no había agua, por lo que era necesario destinar fondos para subsanar este inconveniente.
En principio, el Ejecutivo había solicitado que los US$ 57 millones se destinaran a obras, pero los senadores decidieron hacer una nueva distribución y, según dijeron, con autorización de Hacienda.
Algunos senadores argumentaron por el rechazo, como Stephan Rasmussen (PPQ) y Amado Florentín (PLRA), porque representa un nuevo endeudamiento para el país y los límites de lo razonable ya fueron superados.
Asimismo, se postergó el estudio de otros créditos por US$ 120 millones previstos de la siguiente manera: US$ 100 millones al Fondo de Garantías del Paraguay (Fogapy), US$ 10 millones para capitalizar el Fondo Ganadero (FG) y US$ 10 millones para capitalizar el Crédito Agrícola de Habilitación (CAH).
El plan de recuperación se financia con préstamos y emisión de bonos, que se sumará a la deuda contraída vía ley de emergencia sanitaria por US$ 1.990 millones para enfrentar la pandemia.
Este paquete de US$ 74 millones que tuvo vía libre ayer en el Senado se suma a lo que ya había aprobado hace dos semanas por un monto de US$ 155 millones, que actualmente están a consideración de la Cámara de Diputados para su sanción. El plan de recuperación implica nueva deuda por US$ 349 millones.
Deuda pública ya superó el 31,1% del PIB
La deuda pública trepó a más de US$ 11.015 millones al cierre del mes de setiembre, lo que equivale al 31,1% del PIB, según el último informe del Ministerio de Hacienda. Ya superó el tope razonable del 30% del PIB considerado por economistas, exministros de Hacienda y algunos organismos internacionales. El nivel de endeudamiento aumentó US$ 2.156,4 millones en nueve meses, con respecto al monto con que cerró el ejercicio 2019 cuando los compromisos habían llegado a US$ 8.859,1 millones y esto representaba el 22,7% del PIB. Esto obedece a que se emitió por más de US$ 547 millones, se endeudó vía ley de emergencia sanitaria por US$ 1.990 millones y ahora se plantea un nuevo paquete de deudas por US$ 349 millones.
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