La Industria Nacional del Cemento (INC) lanzó por tercera vez su licitación para la compra de 30.000 toneladas de pet coke o coque de petróleo, combustible que se utiliza en el horno de clínker de la planta de Vallemí, tras una readecuación en su sistema de combustión. En esta ocasión, el llamado se hizo por la vía de la excepción, con total sigilo, e inclusive ya fue adjudicada, según confirmaron a ABC.
En este caso, resultó una vez más beneficiada la firma Swiss Singapore Overseas Enterprises PTE. LTD. (David Aitken), que proveerá a la empresa 300.000 toneladas del insumo por US$ 9 millones, es decir, US$ 300 dólares por cada tonelada (ver resolución de la adjudicación).
La institución ya había cancelado dos llamados anteriores para la compra de coque debido a su elevado costo, pero ahora adjudicaron a un precio muy superior a lo que pagaba la firma estatal por la compra de este producto. Esto teniendo en cuenta que en la última adquisición abonaron solo US$ 220 por cada tonelada.
Llamativamente, la INC alegó “urgencia impostergable” para comprar una vez más con sobreprecio el producto con el expediente de la excepción, pese a que, en su momento, dijeron que contaban con un stock suficiente del producto y que iban a lanzar una licitación con la modalidad tradicional.
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Se consultó al titular de la empresa estatal, Ernesto Benítez, sobre las razones del apuro de esta contratación y resaltó que los plazos ya no daban para lanzar otra licitación internacional.
“Hay suficiente (coque), pero por un lado, los plazos para una licitación pública internacional son muy extensos y se prevén con un mínimo de cuatro meses. Por otro lado, a esta altura, ya no es viable hacer este tipo de llamados por los plazos que impone la ley de Contrataciones, además de que en enero y febrero no se pueden formalizar contratos”, explicó el alto funcionario.
Por otro lado señaló que el precio del producto está más elevado debido a su escasez en el mercado internacional y que, además, la bajante del río genera sobrecostos en la logística. “La compra más baja que conseguimos en su momento es por US$ 220 la tonelada. En ese entonces, el propio combustible estaba a la baja en el mercado internacional y los costos logísticos también, a diferencia de la actualidad”, expresó. Asimismo, manifestó que el costo del coque nuevamente irá bajando, “pero no tan pronto”.
En la INC se invirtieron parte de los US$ 80 millones de los bonos soberanos para mejorar el sistema de combustión y, con ello, aumentar la producción de cemento. Esto aún no se logra y ahora analizan utilizar “biofuel”, por el elevado costo del coque, combustible sólido que debía revolucionar la producción de la cementera.
Otro contrato millonario
A través de otra contratación por vía de la excepción, la INC ya adjudicó a finales de septiembre el contrato de suministro de 7.000 toneladas de coque de petróleo, a un precio de US$ 297 por tonelada, muy superior a los US$ 220 por tonelada que pagó la empresa estatal en la anterior compra que hizo de ese producto. Esto significa que en esta adjudicación ya había pagado 35% más por el producto.
En este caso, también resultó beneficiada la firma Swiss Singapore Overseas Enterprises PTE. LTD., que cobrará US$ 2.079.000 a la cementera por el suministro del mencionado producto, contrato que hasta la fecha se sigue ejecutando.
