De acuerdo a la hipótesis que sostienen la Fiscalía y la Policía, Flores Vargas mató a Díaz Borba y luego se suicidó. Esto ocurrió cerca de las 11:00 de ayer, jueves, en una estancia sin nombre ubicada en la compañía Alarcón de Mayor Martínez. El terreno pertenece al ministro de Salud, Julio Borba.
El fiscal que investiga el hecho, David Cabral, dijo este viernes a ABC que no existe aún una teoría firme sobre por qué ocurrió este hecho. El agente habló de una supuesta mala administración de la estancia por parte de Díaz Borba o de que habría algún vínculo con casos de abigeato.
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En relación a este último punto, las autoridades verificarán hoy el hato vacuno que hay en la estancia para saber si faltan o no animales. Reconoció que el caso es muy llamativo y habló también de que buscarán las balas con que se produjeron las muertes, ya que todos los proyectiles tuvieron orificio de salida.
“Se encontró un arma de fuego de calibre 38. Se procedió a la inspección de los cuerpos. En el caso de Francisco Díaz Borba, recibió tres impactos, tres heridas producidas por arma de fuego (…) Se va a peritar el arma. Sobre el móvil, personal antiabigeato y de la Policía Nacional se trasladará hasta el lugar (…) También está la presunción de que pudo haber indicios de una mala administración en el establecimiento. Eso se va a determinar en el transcurso de la investigación”, afirmó Cabral.
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En ese contexto apareció un testigo apellidado Segovia, un capataz de otra estancia que estaba acompañando a Díaz Borba en el sitio para hacer un alambrado en el sitio donde se produjo el hecho. Según el fiscal, a raíz de la distancia, Segovia no pudo escuchar la discusión entre ambos al momento del homicidio y el supuesto suicidio. De igual forma, la Policía tomó muestras de las manos de este sujeto para descartar su implicancia.
También estaban en el sitio la esposa y los hijos de Díaz Borba, quienes, asustados, se escondieron cuando escucharon los disparos, precisó el fiscal. Tampoco conocen por qué sucedió este hecho.
“Nadie tiene la certeza sobre lo que sucedió y terminó acá. Algún inconveniente tuvo que haberse producido”, finalizó el agente fiscal, al tiempo de reiterar que la investigación recién se abrió y sigue en curso.