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El blanqueo a los tres legisladores, que arrastraban pedidos de pérdida de investidura, se dio mediante el acuerdo previo entre colorados excartistas y oficialistas; un sector del Frente Guasu, el PDP y varios parlamentarios liberales (ver el cuadro de votación).
En cambio, expresaron su repudio e indignación los últimos cartistas del senado Sergio Godoy y Antonio Barrios; los colorados Juan Carlos Galaverna y Enrique Riera; Georgia “Nani” Arrúa y Stephan Rasmussen de PPQ; Blas Llano y Zulma Gómez del PLRA así como Tony Apuril de Hagamos, entre otros.
Votación
Primero se rechazó por 19 votos el pedido de pérdida de investidura contra Javier Zacarías Irún (ANR, excartista), quien está procesado por millonarios desvíos de fondos municipales de Ciudad del Este. Este senador ya fue “blanqueado” en varias instancias judiciales mientras estaba en las carpas de Honor Colorado, sector del que se alejó tras las municipales.
Luego se rechazó por 19 votos la pérdida de investidura de Rodolfo Friedmann (ANR, Añetete), quien está acusado por presunto fraude en las licitaciones de la merienda escolar siendo gobernador de Guairá. La Fiscalía sostiene que usaba dinero de las firmas adjudicadas en la licitación para comprar autos, arte y viajes.
Finalmente se rechazó por 22 votos la expulsión de Sixto Pereira (Frente Guasu), quien no tiene proceso judicial pero fue grabado buscando aparentemente excedentes de tierra para repartirlos a campesinos de su sector.
Contra el cartismo, dicen
Pedro Santa Cruz (PDP) intentó defender su voto en el blanqueo a los procesados Zacarías Irún y Friedmann al señalar que las pérdidas de investiduras pretendían “alterar” la integración del Senado para darle la mayoría al sector del cartismo.
Señaló que los suplentes que asumirían son los cartistas Bernardo “Lalo” Villalba, exdiputado con vínculos con narcotraficantes, y Joel Maidana, de quien dijo es exintendente de Encarnación con denuncias de corrupción pero protegido por la fiscala general Sandra Quiñónez, alegó.
“¡No pasarán, no pasarán!”, dijo al comparar la votación del Senado con la Guerra Civil Española y la lucha contra el fascismo.
Por su parte, la senadora Desirée Masi (PDP) cuestionó a los cartistas y patriaqueridistas indignados por la premura del tratamiento, ya que no tuvieron reparos para expulsar a Paraguayo Cubas (Cruzada Nacional) con solo “20 minutos de antelación”.
Se pierde credibilidad ganada, dicen
“Todo lo que nos depuramos en el Senado, mandamos al tacho para no decir a la mierda”, dijo ayer el senador cartista Sergio Godoy. Stephan Rasmussen (Patria Querida) agregó que la convocatoria apresurada fue irresponsable y sin respeto a la Constitución. Galaverna, enemigo del clan Zacarías, calificó a la sesión de farsa e increpó al titular del Senado, Óscar Salomón (Añetete). “Esta es una sesión lavandina”, dijo Tony Apuril (Hagamos), quien lamentó que el Senado pierda así su credibilidad ganada.