La intervención del Mades fue en un inmueble que sería propiedad de la empresa Los Trigales (LT). En el sitio encontraron una topadora que estaba realizando trabajos de compactación de suelo. Asimismo, se constató que, tanto en la margen derecha como en la izquierda, se echaron algunos árboles nativos.
Los lugareños aseguran que hace años los arroyos Caañabé y el Mbaey, que desembocan en la zona de amortiguamiento de los esterales del Lago Ypoá, están soportando la contaminación por posibles desechos industriales, así como la constante depredación de los árboles que se encuentran en la cuenca de los cauces hídricos.
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Los vecinos manifestaron que les indigna la desaparición de un gran sector de la zona boscosa de la cuenca del Mbaey.
El fiscalizador del Mades Édgar Ibarra informó que constataron que hubo corte de árboles y movimiento de suelo de unos 1.500 metros lineales y unos 15 metros de ancho en ambas márgenes de la cuenca del cauce hídrico del Mbaey.
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Al momento de la intervención, el operario de la máquina topadora que se encontraba en el lugar no pudo explicar si dicho trabajo de movimiento de suelo como también de posible desmonte contaba con la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) aprobada por el Mades.
Los lugareños aseguran que la vegetación debe ser protegida porque el arroyo depende de la franja boscosa para mantener su cauce libre de contaminación y evitar que se colmate.
Los fiscalizadores elevarán el informe a la Asesoría Jurídica para dictaminar qué acciones se va a asumir sobre la intervención realizada.