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Señalaron que en varias ocasiones ni siquiera se enteran de los llamados, en otras ocasiones tuvieron conocimiento a último momento del examen, cuando ya era tarde para ir a la capital.
Después de reclamar la situación pudieron participar en octubre pasado en un llamado para 35 rubros de cargos vacantes, pero todos para la Región Oriental.
“Es una injusticia por parte de la institución, por la cual damos y hacemos de todo para cubrir las labores propias del Ministerio Público, puesto a que ni siquiera ya fuimos convocados para el siguiente examen, a sabiendas que en las ciudades del Chaco es muy elevado el costo de vida y más aún en el monte, por los procedimientos que frecuentemente realizamos, adentrándonos en los mismos con un estado de peligro de vida latente y presente en todo momento”, dice la nota.
Así lo manifiestan los abogados Liz Diana Castillo, Ingrid Noelia Brignardello Velázquez, Alejandra Soledad Segura Agüero y Francisco Javier Aquino Velázquez en una nota dirigida al agente fiscal delegado de Boquerón, Alan Schaerer. El documento también fue enviado al Fiscal General Javier Díaz Verón y a la Fiscal Adjunta Artemisa Marchuk, entre otras. Mientras tanto los firmantes siguen ejerciendo el trabajo de asistente fiscal, con sueldo de secretaria y secretario fiscal “con asignaciones de funciones de asistentes fiscales”.
Ya el año pasado, de tres llamados solo tuvieron conocimiento de uno, en el cual a último momento pudieron participar por primera vez, para un total de 30 rubros de asistente fiscal, de los cuales un solo cargo fue para toda la Región Occidental, que ocupa casi dos tercios de la geografía nacional.
Consideran que aun así con un mínimo de funcionarios cubren a cabalidad este extenso territorio chaqueño, porque “damos todo por la institución, para llegar hasta el último rincón en forma infrahumana, destacando que el Chaco paraguayo es aún casi inaccesible, situación que calificamos de muy injusta por parte de nuestra institución”.
Destacan además que de todos los exámenes llevados a cabo y en las pocas que participaron “nunca se ha publicado el puntaje correspondiente de cada postulante, implementando trabas para una verificación al solicitarnos la presentación de notas personales en un día, fijados solamente para una revisión de los puntajes. En este acto se destaca que nuevamente si obtenemos un permiso para el efecto la Fiscalía Regional de Filadelfia no estaría funcionando, pues prácticamente somos la totalidad de funcionarios de las ocho unidades fiscales existentes”, dice el documento.
Concluyen que al Ministerio Público no le estaría interesando ni estaría preocupándose siquiera de los funcionarios fiscales en el Chaco y exigen ser beneficiados en forma inmediata al cargo de asistentes fiscales y hasta tanto cumplirán funciones solo para los casos meramente urgentes.
Durante una visita a esta zona del Chaco en el año 2012 el Fiscal General Javier Díaz de Verón habló de la necesidad de que el trabajo del Ministerio Público sea más confiable y que el plan estratégico 2011-2016 apunta a acercar la fiscalía a la ciudadanía. Ya en aquella ocasión agentes fiscales señalaron que en muchos casos les faltan los recursos necesarios para actuar en forma rápida.