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Con carteles, banderas paraguayas y pañuelos blancos, un importante número de personas se reunió frente al Congreso Nacional para repudiar varios hechos, principalmente los sueldos abultados en la Cámara de Diputados.
Otros reclamos de los manifestantes giraron en torno a la mala utilización de los recursos del Fonacide, la mala calidad de la salud en los hospitales públicos, el fin de las listas “sábanas” y la acción concreta por parte del Estado para la liberación del suboficial de la Policía Nacional, Edelio Morínigo, secuestrado por el autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
Roberto Espínola, miembro de la organización “Basta Ya”, fue uno de los primeros oradores, quien criticó la desigualdad existente en el país. “Es indignante, es una bofetada a familias humildes la grandes desigualdades en las que vivimos”, expresó el manifestante, desde la tarima instalada en la plaza.
Resaltó además que es tiempo que la ciudadanía salga a las calles para manifestarse contra los abusos del poder.
Varias otras personas de diversas organizaciones civiles tomaron la palabra para exigir el fin de la impunidad en el país, apuntando al Poder Judicial.
Los organizadores de la manifestación habían anunciado que entregarán por escrito a los tres poderes del Estado los reclamos hechos en la jornada.