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Abdito y el Capi Mazzoleni saben que hay muchos que quieren hacerles pisar el jabón para que se deslicen rápidamente fuera de sus cargos.
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Es visible la indignación de la gente que crece a medida que se hacen patentes las carencias, la falta de insumos y medicamentos, la ausencia del Estado para atender la salud.
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Abdito y sus estrategas creyeron que al decir que solo leía la biblia y yéndose a inaugurar obras, la gente se distraería de sus angustias cotidianas por la falta de medicamentos.
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Craso error. La imagen es que como el presidente no lee los diarios ni escucha las noticias, no está enterado de nada, vive en un termo y no podrá dar soluciones a esta crisis.
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La mayoría de los legisladores de la oposición considera que ya no hay nada que hacer y que Abdito debe dar un paso al costado y no solamente el Capi Mazzoleni y su equipo.
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Los súbditos del Patrão en el Congreso, por ahora, lo protegen. Pero, como dice el dicho, podrán cargar con el muerto hasta el cementerio, pero no se van a enterrar con él.
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Al Patrão no le conviene ahora darle el empujón a Abdito porque se vienen las internas y una división puede ser catastrófica para sus planes. Además, sus candidatos Nenecho en Capital y Ulises en CDE tienen demasiados flancos para ser atacados.
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Andy Gubetich sigue enojado porque le suspendieron la compra de un software de casi siete palos verdes. Ahora intenta vender el sistema sobrefacturado como la santa solución para el robo de medicamentos.
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En una interpretación sui generis, Andy dijo ayer que básicamente no le importaba el dictamen de Contraloría que denunció direccionamiento y violación a la ley de Contrataciones.
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El titular del IPS ayer parecía más un seccionalero que un abogado de renombre. Vociferando se lavó las manos ante la falta de medicamentos y el robo denunciado por los ciudadanos de los insumos. Dijo que ya presentó en Fiscalía varias denuncias, pero no mostró ni una sola.
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Mingo Adorno sigue sin dar la cara a sus compueblanos de Puerto Casado. El gobernador está más atento en su pelea con Marlene Ocampos y no atendió hasta ahora el caso de los indígenas accidentados y abandonados.