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Y para no quedar en evidencia, varios otros colorados como Bacchetta, Afara, el precandidato a intendente de Asunción Martín Arévalo, “Trato Apu’a” Ovelar, contribuyeron con sus llamativas ausencias.
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Pero evidentemente hubo un feroz acuerdo no solo entre colorados, sino también con liberales y el Frente Guasu, porque tampoco se animaron a levantar su voz para defender la Carta Magna y la democracia como prometieron en su acto de juramento.
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Lugaucho, Richer y Víctor Ríos, quienes siempre se muestran sensibles gua’u a los atropellos del Estado, se convirtieron en este caso en “verdugos” de nuestra sufrida democracia. Decidieron abstenerse. ¿No tenían opinión acaso sobre lo que estaba ocurriendo?
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Y después la mayoría de los senadores liberales y del Frente Guasu, liderado por Fernando Lugo, intentan convencer a la ciudadanía de que son la alternativa electoral y que respetan la Constitución. Pura mentira.
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Se reeditó de vuelta el acuerdo de la repugnante “enmienda mau”, pero en este caso los abdistas ocuparon el espacio de los oviedistas, quienes ya no tienen representación parlamentaria.
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Evidentemente hubo un acuerdo entre el jefe de Estado y su ahora aliado Cartes para impulsar esta decisión. Si no es así, Marito debería volver a vetar esta ley de autobandidaje. ¿O acaso cambió brutalmente de postura?
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El senador Llano (PLRA) inició ayer una serie que merece ir a Netflix en varios capítulos y temporadas: el reparto de “zoquetes” que hizo “el Mariscal de la Derrota” en Yacyretá.
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Es asqueroso ver cómo familias enteras se ubican sin concurso y capacidad alguna por el solo hecho de caerle simpáticas a Nicanor.
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Hasta se evidencia que la esposa de un juez tiene un “lindo” sueldo. Amóntema la independencia de poderes. Así había sido se “ganan” simpatía$.
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Mientras tanto, el Gobierno por inútil no consigue recursos ni vacunas para la población, que tiene que hacer polladas y hamburgueseadas para comprar algunos medicamentos para sus parientes.
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No solo la pandemia es una desgracia para el mundo y específicamente para el Paraguay, sino también sus principales autoridades.