La esgrima, un deporte poco común que combina la mente con el esfuerzo físico

La agilidad mental y el esfuerzo físico se fusionan en la esgrima, un deporte que te transporta a reinos medievales. La joven Montserrat Viveros (18) piensa que “esta disciplina es muy completa, ya que mezcla el arte de pensar con la habilidad corporal”.

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Desde los ocho años, Montse comenzó a seguir los pasos de su padre en el deporte de blandir valientemente las espadas y, conforme la joven fue adquiriendo experiencia, esta disciplina se convirtió en una parte sumamente importante de su vida. "Hasta ahora, considero que mi papá es el entrenador más valioso de mi carrera", expresa la esgrimista.

Montse comenta que esta disciplina es una de sus fortalezas y, prácticamente, el eje central de su vida. "¿Cómo no enamorarse de un deporte tan lindo y distinto como este? El orgullo y el honor que uno siente al practicar la esgrima son incomparables", afirma.

En esta antigua modalidad deportiva, el arte, la concentración y el esfuerzo físico se fusionan para ejercitar cada aspecto del atleta. “Los esgrimistas denominamos a esta disciplina 'ajedrez en movimiento' porque tenemos que pensar en cómo aplicar nuestras técnicas y estrategias, en qué momento y a qué velocidad”, cuenta Montse.

Nuestro país está muy acostumbrado a los deportes que involucran una pelota y dos equipos; por ende, la esgrima resulta innovadora a pesar de tener sus orígenes en la Edad Media. "Lo que diferencia a esta modalidad de las otras es que se define como un arte y una disciplina a la vez, ya que los combates son elegantes y acordes a los tiempos de la realeza", opina Montse.

Uno de los sueños de la atleta es convertirse en campeona olímpica, pues cree que este logro, además de dejar en alto a nuestra tierra, podría hacer que la esgrima gane más popularidad entre los compatriotas. "Todavía nos falta mucho para alcanzar a países como Francia, Italia o Hungría, pero creo que traer la medalla de oro sería una buena forma de expandir la disciplina y conseguir que más gente se entusiasme con ella", sostiene Montse.

La compatriota obtuvo una medalla de plata en el Campeonato Mundial de Esgrima, también alcanzó el oro a nivel sudamericano en cinco oportunidades y se convirtió en Campeona Panamericana Infantil a los 14 años. "Actualmente, estoy en una de las competencias más duras de la temporada, el Grand Prix en Cali, Colombia. La etapa está destinada a sumar puntos para la clasificación a los Juegos Olímpicos Tokyo 2020", comenta la joven.

La atleta asegura que no hay edad para incursionar en el mundo de las espadas, los sables y los floretes, ya que lo importante es animarse. “Si bien los equipamientos reglamentarios para practicar la esgrima deportiva tienen un costo elevado, la Federación Internacional de Esgrima provee temporalmente a los principiantes de todo el material necesario para inciar los entrenamientos”, finaliza Montse.

Por Belén Cuevas (17 años)

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