28 de marzo de 2024
Usualmente cuando ocurren hechos delictivos de gran despliegue logístico, como la voladura de una sucursal del banco Regional de Pirapó, en septiembre pasado, o el acontecido la madrugada del viernes en Carlos Antonio López, es inevitable la suspicacia en el imaginario popular y se da por sentado que detrás de este tipo de operaciones necesariamente debe existir involucramiento de agentes policiales, en la ejecución misma, o en la cobertura de seguridad, que garantiza a la banda ejecutar la acción y esfumarse.