7 de diciembre de 2025

LUQUE (Arnaldo Espínola, corresponsal). A dos meses del asesinato de la funcionaria judicial María Verónica Gariazu Escobar (29), la investigación fiscal quedó estancada. Varios testigos no fueron llamados para declarar y pese a denuncias de que la víctima, quien también era empleada del abogado Rodrigo Blanco, tenía a su nombre abultadas cuentas bancarias, la justicia no solicitó informes a los bancos.



Los investigadores de la Policía señalaron que el crimen de la funcionaria judicial María Verónica Gariazu Escobar (29) podría aclararse pronto, sobre todo cuando se tengan resultados de algunos elementos que forman parte de la pesquisa.