"¿Y el alma?", preguntó Putin cuando las cámaras le enfocaron durante una reunión celebrada en su despacho en el Kremlin.
El líder ruso, un creyente confeso que cuenta con el apoyo incondicional a la guerra en Ucrania de la Iglesia Ortodoxa, sonrió expresivamente mientras escuchaba la respuesta.
"Y la tercera prioridad (del Instituyo Kurchátov) son el alma y el intelecto", replicó raudo el jefe del instituto, Mijaíl Kovalchuk, en alusión a las principales líneas de trabajo del centro, encabezadas por la energía nuclear y los estudios relacionados con la ciencia de materiales.
Putin, que recibió recientemente un icono de manos del patriarca ortodoxo, Kiril, es un firme defensor de la imagen de Rusia como reserva moral ante el liberalismo occidental.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
