Webber y Massa quieren irse por la puerta grande

SAO PAULO. Mark Webber, que abandonará la Fórmula 1, y Felipe Massa, que dejará Ferrari, tienen razones evidentes para realizar un buen GP de Brasil, este domingo en Interlagos, Sao Paulo, aunque lo más probable es que se encuentren con Sebastian Vettel.

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El alemán, desde que se aseguró en la India su cuarto título mundial, se embarcó en la caza de los récords. El pasado domingo en Austin logró alcanzar el reto de hacerse con ocho victorias consecutivas en una única temporada; una más que su compatriota Michael Schumacher en 2004. Ahora todavía quiere igualar otro récord de ’Schumi’: conseguir 13 victorias en la misma temporada.

Los idealistas y los soñadores querrían que Vettel dejara este domingo la victoria a su compañero Webber para borrar la única mancha de esta temporada, cuando desobedeció las consignas de su equipo para sorprender al australiano, en aquel momento en cabeza del GP de Malasia. Sin embargo, esta posibilidad no está en los planes, según afirmó la escudería dirigida por Christian Horner.

“Sería genial ver a Mark ganar su último GP, pero Sebastian está también en la búsqueda de un récord”, dijo Horner. “Como siempre, será un combate leal entre los dos. Y, de todas formas, Mark no querría una victoria regalada”, añadió.

“Me encuentro en una pendiente resbaladiza”, admitió Webber, de 37 años, este jueves. “Debo ser prudente y no intentar demasiado hacer el tipo de cosas que hacía antes. Todavía conduzco bien, pero no quiero estar por aquí cuando deje de hacerlo tan bien”, añadió el futuro piloto de resistencia de Porsche.

Webber puede que no gane este domingo, pero tiene otro objetivo en la cabeza: terminar en el podio del campeonato de pilotos, como en 2010 y 2011. Para eso, debe conseguir siete puntos más que Lewis Hamilton, que acaba de arrebatar la tercera posición a Kimi Räikkönen, que no participa en las dos últimas pruebas de la temporada a causa de una operación de espalda antes de su regreso a Ferrari el próximo año.

En la escudería italiana precisamente, el panorama está más abierto entre sus dos pilotos que en Red Bull, ya que Fernando Alonso sólo tiene ahora un deseo: que la temporada finalice, ya que una vez más acaba por detrás de Vettel y, casualmente, ahora está rebajando desde hace varias carreras sus tiempos respecto a Massa, por lo menos en los ensayos.

De ahí a que el brasileño gane a domicilio, como cuando en 2008 el título se le escapó de entre las manos en Interlagos y lo ganó Hamilton in extremis, hay un gran margen, teniendo en cuenta el dominio de los Red Bull. En este sentido, el propio Hamilton podría ser candidato a la victoria en Brasil, si su Mercedes está un poco más ajustado que en Austin el pasado domingo, donde fue cuarto.

Si el británico lograra vencer en Brasil, igualaría con dos victorias a su compañero Nico Rosberg, a quien ya tiene asegurado adelantar en la clasificación final del campeonato de pilotos. Además, si una de las ’flechas de plata’ terminara entre los tres primeros, la escudería Mercedes-AMG se aseguraría el subcampeonato del mundo de constructores, algo que parecía imposible al principio de la temporada.

Por su parte, Lotus tampoco ha renunciado totalmente a subirse al podio final de constructores, en el caso que Ferrari tenga un mal fin de semana. En este momento, hay 15 puntos de diferencia entre Mercedes (2°) y Ferrari (3°), mientras que la escudería italiana cuenta con 18 unidades de ventaja sobre Lotus (4°).

Como un doblete en cabeza otorga 43 puntos (25 por la victoria + 18 por la 2° posición), y teniendo en cuenta que un doblete de los ’otros’ que no sean Red Bull, según la fórmula que se cumplió estas últimas semanas, otorga 27 puntos (15 por una 3° plaza + 12 por una 4°), se puede prever que habrá todavía un poco de suspenso.

Para Lotus, dependerá mucho de Romain Grosjean, el más constante de los ’otros’ pilotos (dejando de lado a Vettel) desde el mes de octubre (cuatro podiums y 72 puntos en cinco carreras), así como un poco del sustituto de Räikkönen, Heikki Kovalainen, que tuvo algunos problemas en Austin.

Si los Lotus brillan este domingo con los mismos colores negro y oro que lucía el de Ayrton Senna a comienzos de la década de 1980, querrá decir que el espíritu de fuego de Ayrton, ídolo brasileño de la Fórmula 1, nativo de Sao Paulo y fallecido en Imola en 1994, habrá descendido a darse una vuelta este fin de semana por Interlagos.

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