Como es costumbre para el conjunto de Barrio Obrero en la Copa cada vez que juega de local, la hinchada acompaña en masa y también hace un gran recibimiento. El calor de la gente y las banderas estuvo presente, pero también los fuegos pirotécnicos.
El reglamento de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) establece que el uso de pirotecnia está prohibida y, por tanto, el club será sancionado y deberá abonar una multa. Dejando de lado el monto económico, que probablemente los directivos azulgranas ya conocían, el espectáculo fue total.


