Los dos equipos tradicionales de Paraguay cumplen, como el resto de los clubes, con la cuarentena aplicada por el Gobierno para evitar la propagación del coronavirus, que tiene once casos confirmados en nuestro país. Cerro Porteño y Olimpia tienen a sus jugadores entrenando individualmente en sus respectivos domicilios.
La Asociación Paraguaya de Fútbol prohibió a los planteles las prácticas colectivas y anunció que cuando acabe el protocolo los futbolistas tendrán ocho días para un reacondicionamiento físico antes de reiniciar el torneo Apertura, que fue paralizado antes de la novena jornada. Por ende, los preparadores físicos entregaron tareas a los jugadores.
El parate favorece al Ciclón, ya que Francisco Arce aprovecha el tiempo para recuperar a varios lesionados y ausentes por dengue. Marcos Cáceres y Fernando Amorebieta sufrían de la enfermedad, mientras que Claudio Aquino está con vértigo. “Ya no tiene mareos en estos momentos, pero no podemos saber si volverá a presentarse”, comentó el doctor Aldo Martínez.
Por su parte, el Decano también es beneficiado por la postergación. La plantilla descansa luego de una seguidilla de partidos entre el campeonato local y la Copa Libertadores. Además, Tabaré Viudez está en proceso de recuperación de una luxación del codo izquierdo, lesión sufrida contra River Plate por la octava jornada.
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