El campeonato de Sportivo Luqueño es inestable. Está undécimo en la clasificación y antepenúltimo en la tabla del promedio, el principal campeonato que tiene el Auriazul de Hernán Rodrigo López. Pero los inconvenientes no solamente giran en el factor futbolistico, sino que también en el administrativo. Las deudas y la falta de pagos con el plantel renacen después del regreso del torneo Apertura.
La directiva de Celso Cáceres, integrada por cuatro dirigentes, había abonado en julio varios meses de haberes para que los futbolistas inicien los trabajos de pretemporada. Una vez comenzada la actividad, la institución vuelve a tener atrasos con la plantilla. Esta vez, no hay pago de los sueldos de julio y agosto, pero según pudo corroborar ABC, la intención del presidente es descontar el salario de 18 jugadores (y mantener el de 12).
El plantel rechazó la propuesta y está firme en percibir el ciento por ciento del dinero que corresponde a cada uno. Además, Cáceres y compañía siguen adeudando dos premios de Copa Sudamericana: uno corresponde a la clasificación al certamen después de superar 3-2 a Deportivo Santaní en la última jornada del torneo Clausura 2019 y el otro pertenece al pase a Segunda Fase luego de eliminar a Mineros de Venezuela.
La directiva debía realizar el pago el fin de semana, pero faltó nuevamente a la promesa. El rumor, durante el domingo, fue que los jugadores amenazaron con no presentarse al duelo contra Guaireña, pero esta versión fue desmentida por una fuente a ABC. El martes, a las 16:00, los dirigidos por Rodrigo López visitan al Albiceleste por la jornada 14 del campeonato.
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