El técnico se sometió ayer a la prueba del covid-19 junto los con integrantes de su staff, Jorge Martín Núñez (AT), Eduardo Pérez (PF) y Cristian Brítez (EA). Si todo sale bien, Paredes se incorporará a las actividades del plantel auriazul esta tarde, para observar el trabajo de su colega Hernán Rodrigo López, quien mañana dirigirá su último partido, en un duelo contra 12 de Octubre en el Feliciano Cáceres, marcado para las 17:00.
“Es uno de los desafíos más importantes de mi carrera, la tomo como tal y con mucha responsabilidad. Se que no será fácil, pero nos motiva eso mismo para demostrar que el profesional paraguayo está capacitado. Tuve la fortuna de jugar en el Sportivo Luqueño y cuando vestí la camiseta sentí algo especial porque todo lo que envuelve la ciudad, el bullicio. Ya en ese tiempo estaba pensando en la dirección técnica y que me gustaría alguna vez ser entrenador de un equipo así, especialmente del Sportivo Luqueño. Estamos apunta de pie ahora y llenar los requisitos de los protocolos para acercarnos al grupo de trabajo”, manifestó en la charla ayer con nuestro diario, Carlos Humberto, quien en 2010 jugó 28 partidos con la casaca auriazul.
“No estamos ajenos a la situación de todo lo que envuelve el Sportivo Luqueño, dirigencial y deportiva. Creo que una cosas, y me enseñaron los grandes maestros: no vale la pena hablar de los que no están, vale la pena enfocarnos en los que están, darle todo con los que sí podes contar”, remarcó el que asumirá oficial el cargo el sábado y sentenció que “tener un vestuario sano es mucho más importante que mil entrenamientos tácticos y técnicos. Tener un grupo comprometido en una sola causa vale más que diez mil entrenamientos que se puede hacer”.