Partidazo, con goles de gran factura
El partido se presentó parejo, pero en poco tiempo el Rojo mallorquino estableció una clara diferencia, que la pudo traducir en el marcador. Como era de esperarse, se produjo la sacudida azul para acortar distancias y cerrar una primera etapa por demás movida.
Un perfecto lanzamiento de tiro libre de Luis Fernández fue conectado por Clementino González para establecer el 1-0, con golpe de cabeza. La defensa local estuvo desacomodada.
A Sol le costó encontrar su juego. Mientras lo buscaba, Junior Marabel establecía el 2-0 luego de una maniobra personal en la que tuvo dos recortes frente a los estáticos zagueros. El arquero Luis Ojeda nada pudo hacer con el disparo que tuvo potencia y buena dirección.
La anotación danzarina se produjo tras un pase de Richard Cabrera a Emiliano Ozuna. El argentino le pegó de primer al balón en el palo de Gustavo Arévalos, superado por la potencia del envío.
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La complementaria fue de dominio solense. Mayo peso ofensivo con el ingreso de Benegas, que empezó a incomodar a la última línea mallorquina.

El conjunto altoparanaense replegó sus líneas, saliendo a la medida de sus posibilidades. El objetivo era conservar la ventaja, más que ampliarla.
El tiempo pasaba y a Sol, que buscaba por abajo, arriba, los costados, le costaba salir de perdedor. Tuvo buenos momentos que no los pudo aprovechar.
El contragolpe fulminante para la estupenda resolución de Clementino con el adelantamiento de Ojeda fue una verdadera “puñalada” para Sol, al que le costaba marcar. Sin embargo, recibía la nueva estocada con suma facilidad.
Jugado, el conjunto dueño de casa se expuso a una goleada en el intento por revertir la situación. Descontó con una espectacular chilena del defensor Jorge Aguilar.
En el fútbol, no se vive de merecimientos. La recuperación futbolística solense fue buena, pero no alcanzó para evitar la dolorosa caída en casa.
“General” dio un salto gigantesco. Del puesto 12 (último), pasó al séptimo y obtuvo un refuerzo anímico para encarar la fase de grupos de la Copa Sudamericana.
El destape de Clementino
Clementino González Martínez (31 años) tuvo una destacada actuación, contribuyendo con dos anotaciones y un generoso despliegue físico para el éxito del General Caballero de Juan León Mallorquín.
“Merecimos esta victoria. Veníamos trabajando bien, pero los resultados no nos acompañaban”, señaló el atacante, quien militó en varios clubes de Uruguay.
Consultado sobre la titularidad, dejando en el banco de suplentes al goleador histórico del fútbol nacional, Santiago Gabriel Salcedo, Clementino significó: “Todos somos importantes en el plantel. Me tocó jugar y lo aproveché”.