Los hechos que se investigan se remontan a 2011, cuando Blatter, por entonces presidente de la FIFA, efectuó un pago “injustificado” a Platini, en esos tiempos titular de la UEFA, por dos millones de francos suizos (2 millones de dólares).
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El Tribunal Federal suizo deberá emitir una sentencia el 8 de julio, cerrando el primer capítulo de un caso que puso fin abruptamente a las carreras del suizo y del francés y quienes arriesgaban una condena de hasta cinco años de cárcel.
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La suspensión de la pena podría significar que ninguno de los dos exdirectivos tenga que ir a prisión, salvo que incurrieran en un nuevo delito.
Fraude, estafa, falsificación
El Ministerio Público de la Confederación Helvética acusó a Blatter por los delitos de estafa, apropiación indebida, administración fraudulenta y falsificación de documentos.
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Platini, en tanto, está acusado de estafa, concurso en apropiación indebida y en administración fraudulenta bajo la figura de complicidad, así como también por falsificación de documentos.
El fiscal Thomas Hildbrand solicitó que la condena sea acompañada por una suspensión de la pena, con dos años de libertad vigilada para Blatter, de 86 años, y para Platini, de 66.
Los antecedentes
El caso gira en torno a un pago de cerca de dos millones de euros realizado por Blatter a Platini en 2011 por trabajos de asesoramiento realizados entre 1998 y 2002, que la Fiscalía helvética considera un posible delito de fraude al hacerse sin base legal, “perjudicando el patrimonio de la FIFA y enriqueciendo de forma ilícita” al francés.
El Comité de Ética de la FIFA inhabilitó en 2015 a ambos durante ocho años, lo que impidió a Platini presentarse a las elecciones a la presidencia de la organización, ganadas por el actual presidente, Gianni Infantino, entonces secretario general de la UEFA.
