"En la temporada 2019/20, las consecuencias financieras de la crisis de la Covid-19 fueron limitadas, pero tendrán más impacto para las temporadas 2020/2021 y eventualmente en 2022/2023", señala Deloitte, sobre los ingresos de los clubes de la ProLeague belga.
La caída de la facturación "se situará entre 80 y 120 millones de euros", agrega la consultora en su informe, encargado por la ProLeague.
Los equipos belgas facturaron en 2019/20 un total de 373,5 millones de euros, un 1,3 % menos que los 378,5 millones de la temporada precedente pero más que los 321 millones de la campaña de 2017/18, primera en la que la consultora publicó un análisis.
El descenso del volumen de negocio por venta de entradas debido a las restricciones de la pandemia fue de 16 millones en el ejercicio publicado, que se vio alterado a partir de marzo de 2020 por la Covid-19.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Pero el impacto económico será hasta de un 33 % más en la presente temporada ante la prohibición de disputar los encuentros con público durante la mayor parte de año, agrega Deloitte.
En 2019/20, las primas de la UEFA a los clubes belgas aumentaron un 25 %, hasta los 79,3 millones, mientras que los ingresos por traspasos fueron de 109,2 millones de euros, es decir, un 87 millones más que en 2018/19.
El gasto de los clubes en salarios de jugadores descendió ligeramente en 2019/20, con 236,5 millones de euros frente a los 249,1 millones del ejercicio precedente, si bien las cifras que ofrece Deloitte son aproximativos pues hay clubes (como R.E. Virton, KSC Lokeren y SV Roeselare) de los que no dispone de datos.
El salario medio anual bruto de los futbolistas de la primera y la segunda división belga aumentó un 7 % para alcanzar los 249.000 euros, si bien se explica "por los salarios medios más elevados los jugadores" de los grandes clubes belgas (Brujas, Anderlecht, Gand, Genk y Standard).
El salario medio de los futbolistas de primera división alcanzó los 280.000 euros brutos al año.
