El defensa, que militaba en ese momento en Olympiacos, llegó a ser detenido de forma temporal, pero el tribunal consideró que no existen pruebas para condenarle a la vista de los testimonios de los testigos y del examen forense recabados durante las investigaciones preliminar y principal.
Semedo, que siempre proclamó su inocencia, juega actualmente en el Al-Duhail catarí, al que llegó tras pasar por el Oporto. Con anterioridad en su carrera militó en el Sporting Lisboa, el Reus, el Vitoria Setúbal, el Villarreal, el Huesca y el Rio Ave.
El luso fue puesto en libertad el jueves 2 de septiembre de 2021 bajo una fianza de 10.00 euros tras declarar ante la juez y el fiscal, quienes decidieron que no se cumplían los requisitos legales para ponerle en prisión preventiva.
En su declaración entonces, que se prolongó durante dos horas y media, el jugador rechazó el acta de acusación y declaró que las relaciones sexuales se produjeron con el consentimiento de todas las personas implicadas y por eso el delito de violación en grupo es inexistente. Además, señaló, la demandante le había asegurado que tenía 19 y no 17 años.
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En 2018, todavía en su etapa como jugador del Villarreal, el portugués fue detenido y encarcelado durante 142 días por secuestrar y agredir a un hombre en su domicilio particular de Valencia.
Tras ser condenado a diez años por detención ilegal, lesiones, robo y tenencia ilícita de armas, pena que acabo reduciéndose a cinco, finalmente no tuvo que regresar a la cárcel a cambio de comprometerse a no pisar España en ocho años.
Semedo fue internacional con la selección de fútbol sub-21 de Portugal en diez ocasiones y militó en el Villarreal entre 2017 y 2019.
"Desde el primer momento que asumí la defensa de Semedo, afirmé que no había pruebas que fundamentaran los cargos en su contra. Al contrario, todas las pruebas condujeron a su absolución", indicó la abogada del jugador, Marizanna Kikiri, al diario 'Proto Thema'.