"Griezmann es un jugador determinante para nosotros. Importantísimo. Cuando él está bien, el equipo juega en otro nivel. Tiene una circulación y una asociación defensiva y ofensiva en los pasajes para atacar de lo mejor y cuando está bien nos permite también tener más opciones", destacó el técnico en rueda de prensa en el Metropolitano.
"Es un partido que no fue simple. Enfrentamos a un rival que juega muy bien. Vimos el primer tiempo un rival valiente, que ocupa muy bien los espacios, que recupera muchos balones en campo rival. La tendencia del primer tiempo no salió tan bien, aunque tuvimos la ocasión de Carrasco", repasó.
"En el segundo tiempo cambiamos un poco, buscamos atacar más en 5-3-2, y se vio de a poco que el equipo fue mejorando. Por la derecha, el equipo ataca muy bien juegue quien juegue. Nos da mucha fuerza por ese lugar", agregó.
Y resaltó la "valentía del equipo, que venía pidiendo por cómo se estaba desarrollando el segundo tiempo"; el "cambio de Barrios, que fue muy bueno, que le dio un cambio de paso al equipo", aunque no estaban "jugando mal ni Correa ni De Paul ni Carrasco, que estaba mejorando", para "dar un paso más" para ir a por el partido.
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"Nos llevamos una victoria importantísima, con actuaciones en el segundo tiempo, sobre todo, de alto nivel de varios", enfocó el entrenador, que resaltó a Reinildo Mandava: "Admiración, porque no es fácil defender. Todos piensan que defender es más fácil que atacar y defender no es fácil. Tienes que tener intuición, agresividad, fortaleza, seguridad...".
"Y él todo eso lo hace extraordinariamente bien. Nos dice que quiere atacar más. Lo vamos a trabajar en esa faceta para ver si lo puede encontrar también", añadió el técnico, que insistió en el cambio del equipo desde la reanudación de la competición tras el Mundial.
"Convivimos con una temporada diferente. Lo más importante en la vida es no detenerse en los problemas, sino resolverlos. Hemos tenido situaciones complicadas, nos hemos quedado fuera de la Champions demasiado pronto, en la Copa competimos muy bien y hubo un cambio muy claro a partir del Mundial. Los jugadores están enganchados, el equipo juega en equipo y trabaja para que podamos competir como competimos. No es casualidad", dijo.
Simeone también habló del ambiente enrarecido en el Metropolitano. "Vi un cambio. La gente estuvo muchísimo más cerca que otros partidos y conectó con el equipo, posiblemente porque el equipo respondía de abajo para arriba. No fue igual que otros partidos. Hubo un cambio. Lo percibí, lo sentí", declaró.
"En la familia nos podemos pelear, el abuelo con el hijo, el hijo con los tíos, pero cuando vas a pelear con otra familia los nuestros son los nuestros. Y aquí no hay nadie más importante que nadie. Lo importante es el Atlético de Madrid", abundó.
"Soy entrenador y tengo que volcarme sobre todo en lo fundamental, en generar lo que necesitamos generar, que el equipo esté bien y contagie. El fútbol es contagio. Uno cuando era chico se entusiasmaba cuando pasaban cosas buenas dentro del campo y ni te importaba si ibas cuarto o quinto. Hoy la gente se enganchó con cómo estaba compitiendo el equipo. Lo que en realidad es importante es el Atlético de Madrid", remarcó.