“En los 80 minutos estuvimos en el partido, casi hicimos el empate”, lamentó el entrenador nórdico, que piensa que si el choque hubiera acabado en empate “nadie podría decir nada”.

“Cuando empezamos a jugar un poco mejor regalamos el balón unas cuantas veces. No era lo que pretendíamos, pero los primeros minutos fueron muy difíciles”, reconoció Solbakken, que se queda con el partido “sólido” que logró jugar su equipo ante una selección española que "juega muy bien".

“Tuvimos oportunidades muy grandes con el 1-0, tener seis ocasiones contra España fuera de casa no está nada mal”, continuó, para después aclarar que conocía el método de Luis de la Fuente, al que le tiene estudiado desde la sub-21, al que le tiene “mucho respeto” y cree que “lo hará mejor todavía como entrenador absoluto”.