Svitolina arrancó muy bien el duelo, con dos roturas en los tres primeros juegos. Acto seguido cedió su servicio, aunque consiguió conservar su ventaja para ponerse un set arriba. Idénticos derroteros siguió la manga posterior, con un 0-3 de salida al que dio continuidad hasta superar a su rival en la cuarta bola de partido.
Se trata de una victoria muy especial para Svitolina, no solo por la contraria que tenía enfrente sino porque le permite reencontrarse con sus mejores sensaciones tras un tiempo alejada de las pistas por diferentes motivos, lo que le había precipitado hasta más allá del número 500 del circuito.
