El gol conseguido por Mohamed Khamis, en el minuto 6, fue determinante en el éxito de Libia, ya que le dio tranquilidad en su juego y obligo a Nueva Zelanda a tomar riesgos en busca del empate y prueba de ello es que lanzó en 38 ocasiones y solo anotó un tanto, el logrado por Jordan Ditfort cuando solo quedaban 30 segundos para el final.

Libia sacó más provecho a sus lanzamientos, un total de 29, para conseguir dos goles más, obtenidos por Mohamed Zreeg, en los minutos 28, y Feras Abuksheam en el 40.

A ocho minutos del final, Nueva Zelanda decidió utilizar portero jugador, pero a pesar de tener mucha posesión, no pudo acortar la diferencia y perdió por 3-1 ante la alegría de los africanos.

Libia jugará el próximo miércoles, día 18 de septiembre ante Kazajistán, y Nueva Zelanda, con España.

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